miércoles, 20 de septiembre de 2006

El ferry: un (fi)asco que se arrastra en el mar

Esta es una catarsis a destiempo, pero ¿cuántos años tenemos siendo náufragos del ferry? ¿Soportando las (c)olas, el bochornoso calor, el vacilón de sus corsarios, el cheverismo insular y de tierra firme para con nosotros, sus ilustres borregos ilustrados?

Ellos, los filibusteros sobre quienes gravita el monopolio del ferry, no merecen transportar nada: ni mercancías, ni animales ni gente. Pero nosotros, los usuarios, somos los pendejos supremos que nos merecemos, a punta de calárnosla, esta gestión inservible de no-servicio y sí lucro a toda costa.

Abran el mercado a nuevas concesiones. Bienvenidos los canadienses, escandinavos, japoneses, noruegos, senegalíes...¡que vengan, pero ya, a hacerse cargo del negocio los vikingos!

Sólo le deseo a la familia bucanera que le caiga encima las siete plagas del seniat; que nosotros dejemos de pagar tarifas cartelizadas para que nos frieguen y que los accionistas se coman sus chatarras y prueben su propia ración de coprofagia, a la que renunciamos sus ex-víctimas.

O prisión domiciliaria a bordo de sus “cayucos” (pateras, ranchos flotantes) y que naufraguen eternamente entre Puerto La Cruz y Punta de Piedras, dando tumbos sobre las olas caribeñas.

¡Las concesiones sin servicio son un puto asco!


(Imagen by Heidi Taillefer)

6 comentarios:

  1. El ferry... Un desastre.

    De un tiempo para acá me he imaginado al fantasma de Fucho Tovar errando por siempre en la proa de una de esas embarcaciones malditas.

    ¡Cuánto horror, Javier!

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  2. Roberto: atractiva imagen fantasmagórica la del patriarca fundador del ferry condenado a deambular per secula seculorum en sus cayucos, herencia de sus vástagos.

    Jorge: el ferry no es más que purito subdesarrollo ¿flotante?

    Abrazo náufrago, JML.

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  3. sin duda existen ciertos servicios que no pueden ni deben constituirse en un monopolio sin derecho a pataleo...

    es una d elas cosas que más me preocupan, situaciones como las del ferry nos van como que ablandando, haciendo que nos acostumbremos a ese síntoma de la resignación a la mediocridad que es el conformismo...

    salud por el ejercicio de soñar y exigir un trato mejor

    j.

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  4. una muestra de cómo el conformismo es un síntoma inequívoco de la mediocridad...

    salud por soñar y exigir libre competencia y mejor servicio

    j.

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  5. Jesús: sin importar la magnitud de los capitales involucrados, no hemos logrado desterrar la mentalidad imperante de "la taguara" implantada en nuestros cerebros recalentados por el trópico; es el conceptico de la fachada bien pintadita y la recepcionista maquillada con su presencia de "buena". Imagino (y excúsenme la escatología) que los accionistas de los cayucos habrán pensado: "si la mierda flota, nuestro ferry también lo hará". Abrazo con salvavidas, JML.

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  6. Anónimo07:40

    Que les revoquen su patente de corso; que los nipones construyan un puente; que Olafo se apersone con su flota; que el Titanic rediviva tripulado por Kate Winslet en plan mascarón de proa con sus tetas adobándose de salitre; que se arreche la cacica Isabel y se amotine desde ultratumba; que naveguemos todos en el yellow submarine de los beatles...

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